Tras nueve meses reportada desaparecida, mujer llega a su casa y cuenta dónde estaba

Fany Esther Bautista tiene 32 años. (FUENTE EXTERNA)

Tras nueve meses desaparecida, una mujer de 32 años llegó a su casa sana y salva. Fany Esther Bautista había salido de su residencia en la comunidad Tarana, de Villa Riva, provincia Duarte, rumbo a un cumpleaños de una amiga el 12 de junio de 2022 en el municipio Mao. Cuando iba de regreso a su casa se sentía desorientada hasta que perdió el conocimiento.

Narró que cuando despertó se encontraba en la casa de una señora en Santiago Rodríguez, pero que, hasta hace poco, fue que logró recordar a sus parientes.

Al hablar de la situación, la dama expresó que todo esto se debe a «una brujería», la cual se la echaron con la intención de que pierda el control de sus acciones. Asegura que en varias ocasiones fue asistida por un brujo haitiano, quien poco a poco le ha sacado la maldad, que según dice, le lanzaron.

«A mí me echaron una vaina, una brujería, y yo la tengo todavía, yo me pongo mala aquí», manifestó. Asegura que en varias ocasiones ha vomitado una flema negra, la cual supuestamente es la prueba de la brujería.

Entre los síntomas que dice sentir son calentamientos en los pies y que también se le mueve algo fuerte en el estómago.

Precisó que en la casa donde la tenían todo este tiempo, recibió todas las atenciones de lugar. El pasado lunes la señora que la asistía, de unos 70 años, observó en la noticia que la dama la había reportado como desaparecida, por lo que decidió llamar a los contactos que habían ofrecido los familiares.

Luego, Fany se comunicó con su madre, Mariana Bautista, asegurándole que se encontraba bien. El martes la señora Mariana fue a buscar a su hija llevándola con ella hacía la comunidad donde residen.

Fany agregó que, aunque esta semana buscarán ayuda médica, tiene contemplado visitar un brujo en Nagua para que le termine de sacar la brujería que afirma le lanzaron.

Hace unos años Fany también desapareció, por un periodo de nueve meses. Indicó que en ese momento sentía la misma desorientación y que gracias a un señor logró llegar a su casa junto a sus familiares.