Los espacios publicitarios más codiciados de Estados Unidos están oficialmente vendidos. Fox anunció el lunes que los espacios para el Super Bowl LVII se agotaron.
El gran partido entre los Chiefs de Kansas City y los Eagles de Filadelfia se disputará el domingo.
El Super Bowl es el más importante espacio para la publicidad, los vendedores pelean por tener sus productos enfrente de más de 100 millones de personas que los miran cada año. Mark Evans, vicepresidente ejecutivo de venta de espacios publicitarios para Fox Sports, dijo que algunos anuncios se vendieron por más de 7 millones de dólares con una duración de 30 segundos. La mayoría se vendió entre 6 y 7 millones de dólares.
Anheuser-Busch sigue siendo la principal anunciante con tres minutos de tiempo al aire en cadena nacional. La gigante cervecera renunció a su acuerdo para ser la única anunciante de bebidas alcohólicas este año, por lo que Heineken, Diageo, Remy Martin y Molson Coors también entran al juego. Otras grandes categorías de publicidad incluyen comida procesada como Doritos y M&Ms, estudios de cine, servicios de streaming, marcas de autos y empresas tecnológicas, dijo Evans. Este año quedaron fuera las empresas de criptomonedas.
El año pasado el Super Bowl fue apodado el “Cripto Bowl” porque las empresas de criptomonedas FTX, Coinbase, Crypto.com y eToro, tuvieron comerciales deslumbrantes. La tendencia era parte de un esfuerzo de las empresas de criptomonedas para entrar en el mercado general con patrocinios a deportes. Pero en noviembre FTX se declaró en bancarrota y su fundador fue acusado de defraudar a inversionistas.
Este año dos anunciantes de criptomonedas tenían comerciales apartados y hechos y otros dos “estaban en la recta final”, dijo Evans. Pero cuando se supo la noticia de FTX esos acuerdos no se completaron.
Ahora “hay cero representación en esa categoría”, dijo.
Evans señaló que la mayoría de los anuncios del Super Bowl se vendieron mucho antes de lo normal, más del 90% de su inventario publicitario para el Super Bowl se había agotado a final del verano, pues los anunciantes establecidos competían por los espacios más valiosos. Pero el resto de los espacios tardaron en venderse, en parte por la implosión del mercado de las criptomonedas, así como preocupaciones de los anunciantes en general sobre la economía global, dijo Evans.
El año pasado, NBC vendió sus espacios rápidamente y dijo que una cifra no revelada de anuncios de 30 segundos se vendió por 7 millones, un aumento con respecto a los 6,5 millones que alcanzaron los anuncios de 2021.