El juez del Juzgado de Atención Permanente de la provincia Santo Domingo, Bernardo Coplin García, dictó tres meses de prisión preventiva y garantía económica a los supuestos implicados en el caso de clonación de las tarjetas de ayudas sociales del programa Supérate.
A los implicados Juana Felicia Guillén, Bernaldo Santiago Hernández Concepción y Odalis Florentino el juez les concedió una garantía económica, presentación periódica e impedimento de salida.
La garantía económica para Hernández Concepción fue de RD$100 mil, mientras que a Guillén y Florentino fue de RD$80 mil.
De igual forma, a Jonathan Martínez, Ydalisis Maribel López y Yanilda Altagracia Rodríguez Herrera fueron enviados a la cárcel de Najayo Hombres y Najayo Mujeres y deberán cumplir una pena de tres meses de prisión preventiva.
El abogado de Jonathan Martínez, Juan Morel indicó que en un principio el Ministerio Público estaba pidiendo presión preventiva de 18 meses para todos los imputados, pero que el juez explicó que, aunque el caso se declaró complejo, no ameritaba una medida de un año y seis meses para cada uno.
Morel dijo que su representado no fue favorecido con la libertad bajo fianza, pero entiende que las investigaciones que realice el Ministerio Publico esclarecerán todo.
“Solo puedo decir que no son todos los que están aquí, ni están todos los que son”, manifestó el togado.
De su lado el abogado de Yanilda Altagracia Rodríguez, Onoris Casado Pujols, indicó que la medida impuesta a su cliente es desproporcionada, ya que a tres imputados le concedieron libertad bajo fianza y a otros tres los envían a recintos penitenciarios, cuando todos los imputados están acusados en un mismo caso.
Casado Pujols sostuvo que su cliente fue una persona utilizada por delincuentes «que se dedican a esa mafia» y que el mismo fiscal lo dice en su investigación.
De acuerdo a las declaraciones de los abogados, el Ministerio Público le dio el trato particular de acuerdo a su posible responsabilidad dentro del caso.
El Ministerio Público dijo que las transacciones con las tarjetas clonadas eran realizadas en lugares desconocidos por los beneficiarios de los subsidios, y se ejecutaban en horarios no habituales (sobre todo fin de semana y en avanzadas horas de la noche o en la madrugada).
Las evidencias señalan que solo el fin de semana, del 18 al 20 de febrero de este año, el grupo habría sustraído más de RD$14 millones de los fondos de estos subsidios gubernamentales a personas de escasos recursos.