Argenis Contreras, uno de los principales acusados en la muerte de Yuniol Ramírez y el caso OMSA. (Foto de archivo)
El Ministerio Público presentó ante el Segundo Tribunal Colegiado del Distrito Nacional varios testigos para establecer los movimientos realizados el 11 de octubre por el imputado Argenis Contreras después de la muerte del abogado y profesor universitario Yuniol Ramírez.
Entre los testigos presentados está el taxista Delbis Laureano, que supuestamente ofreció un servicio para transportar a Argenis Contreras González y Víctor Elisander Ravelo Campos (El Herrero).
También presentaron el testimonio del señor Hilario Rafael Santo Polanco. Mediante sus declaraciones establecieron que se dedica a servicios de grúas y que el imputado Víctor Elisander Ravelo Campos (El Herrero) le contrató los servicios de una grúa para llevar un vehículo hasta el parqueo de la Oficina Metropolitana de Servicios de Autobuses (OMSA). El vehículo habría sido evidencia del crimen, asegura el Ministerio Público.
Otros que testificaron fueron el señor Miguel Antonio Céspedes y Juan Díaz Agüero, quienes supuestamente tuvieron contacto con Argenis Contreras la noche del 11 de octubre cuando ese imputado hacía movimientos para escapar de las autoridades tras el asesinato de Yuniol.
Argenis Contreras es procesado por su vinculación como autor material del asesinato de Yuniol Ramírez Ferreras, ocurrido en octubre de 2017, un hecho criminal vinculado con actos de corrupción en la OMSA.
Los acusados en el procesoManuel Rivas, exdirector de la OMSA, y Faustino Rosario Díaz, están acusados de incurrir en corrupción en la institución. En tanto que por la muerte de Yuniol Ramírez se encuentran en juicio además de Argenis Contreras, el señor José Mercado (El Grande), Víctor Ravelo Campos (El Herrero), Jorge Abreu, Heidy Peña y Lilian Francisca Suárez.
Asesinato y huida
La tarde del jueves 12 de octubre del 2017 la sociedad dominicana fue conmocionada con la noticia del horrendo crimen. El profesor Yuniol Ramírez, de 45 años, fue asesinado y encontrado en una cañada de Hato Nuevo, en la provincia Santo Domingo. Tenía las manos y el cuello atados con cadenas sujetas a un bloque de construcción.
A Yuniol Ramírez lo reportaron desaparecido el día anterior, el 11 de octubre, luego de haber impartido docencia en la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD). Tenía otra clase ese día, pero no se le volvió a ver.