La Fundación Santa Fe de Bogotá emitió este martes 10 de junio un nuevo parte médico sobre la salud del senador y precandidato presidencial Miguel Uribe Turbay, quien permanece ingresado en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) tras haber sido víctima de un atentado con arma de fuego el pasado 7 de junio.
Según el comunicado, el político «continúa en la Unidad de Cuidados Intensivos, con todo el monitoreo y los cuidados que requiere, permaneciendo en estado crítico«. No obstante, la institución médica indicó que «en esa franja de complejidad se encuentra estable y las intervenciones realizadas en estas horas recientes mantienen su condición».
La clínica señaló además que se siguen realizando «las acciones necesarias para mitigar el impacto de las lesiones que recibió». El pronóstico, sin embargo, «sigue siendo el previamente reportado», manteniéndose reservado y delicado.
Una lucha sostenida por la vida
Desde el atentado, ocurrido en el barrio Modelia de Bogotá, Uribe Turbay ha sido intervenido quirúrgicamente y trasladado a la Fundación Santa Fe para cuidados especializados. Según reportes anteriores, uno de los proyectiles impactó su cráneo, lo que obligó a una operación de emergencia y un proceso intensivo de estabilización.
El 8 de junio fue trasladado a la UCI, y un día después el equipo médico informó que sus respuestas a los tratamientos eran limitadas. El parte difundido este martes representa una señal de estabilidad dentro de un estado aún considerado crítico.
«Miguel necesita un milagro«, dice su esposa
De acuerdo con el diario colombiano El Tiempo, María Claudia Tarazona, esposa del precandidato, ha sido enfática en su llamado a la ciudadanía. A través de su cuenta de Instagram expresó: «Les pido, de todo corazón, que no paren de rezar. Miguel necesita un milagro«.
El país sigue atento a la evolución del estado de salud del senador, una de las figuras más visibles de la oposición al gobierno de Gustavo Petro. Mientras tanto, las autoridades continúan investigando las circunstancias del atentado y el posible seguimiento previo a la agresión.