El exgobernante brasileño Luiz Inácio Lula da Silva depositó su voto este domingo en la segunda vuelta de las elecciones en las que aspira a recuperar el poder y afirmó que el pueblo define este domingo el modelo de país que quiere.
«Creo que es un día muy importante para el pueblo brasileño porque hoy el pueblo está definiendo el modelo de Brasil que desea, el modelo de vida que quiere», dijo Lula a periodistas.
El líder progresista votó en una escuela en Sao Bernardo do Campo, ciudad de la zona metropolitana de Sao Paulo donde inició su carrera política, una hora y veinte después de la apertura de los colegios electorales.
Su rival en las elecciones, el presidente Jair Bolsonaro, líder de la ultraderecha, votó en Río de Janeiro a las 8.00 hora local (11.00 GMT), hora de apertura de los colegios electorales.
Unos 156.4 millones de brasileños están llamados a las urnas, que permanecerán abiertas hasta las 17.00 hora local (20.00 GMT), aunque al igual que en la primera vuelta, celebrada el 2 de octubre, se permitirá votar a todos los electores que se encuentren en la fila a la hora del cierre.
En la primera vuelta, Lula, abanderado de un amplio frente progresista al que se han sumado fuerzas de centro y centroderecha, fue el candidato más votado con el 48.4 % de los votos, frente al 43.2 % que obtuvo el capitán retirado del Ejército, que aspira a un nuevo mandato de cuatro años.
La votación de este domingo tiene lugar en las 5,570 ciudades del país y en 181 localidades del extranjero.
Además de presidente y vicepresidente, los brasileños de 12 estados tendrán que elegir a su gobernador en segunda vuelta, entre ellos el de Sao Paulo, la región más poblada y motor de la economía del país.