Ni la firma de acuerdos, como el Pacto por la Reforma Educativa del 2014, ni la sentencia del Tribunal Constitucional que reconfirma la decisión de un tribunal, que prohíbe a la Asociación Dominicana de Profesores (ADP) paralizar las clases en días laborables, han impedido que el sindicato realice sus actividades de lunes a viernes, afectando a los estudiantes.
El pasado viernes el gremio anunció la suspensión de las clases para realizar «asambleas» en las 155 seccionales en todo el país, dejando sin docencia a más de dos millones de estudiantes.
Para los días 26 de mayo y el 7 de junio los maestros abandonarán de nuevo los centros educativos para protestar frente al Ministerio de Educación y al Palacio Nacional en demanda de aumento salarial para los pensionados y jubilados y los docentes activos. Estas acciones se realizan a semanas de que concluya el año escolar 2022-2023.
El viernes pasado se cumplió a cabalidad la celebración de las asambleas con la participación masiva de los profesores, lo que agradeció el presidente de la ADP, Eduardo Hidalgo.
El presidente de la ADP, recordó que además de las reivindicaciones de los jubilados y pensionados, se suma la lucha por el aumento salarial de los docentes activos, la situación que atraviesan las maestras del Nivel Inicial para que se humanice su trabajo en las aulas.
Igualmente, la aplicación de la Evaluación del Desempeño, la ratificación de los coordinadores pedagógicos, así como la mejora en las plantas físicas de los centros educativos.
Son excusas, dice el ministro
El ministro Ángel Hernández considera que la decisión de la ADP de convocar «Asambleas» en los diferentes territorios del país no es más que una estrategia para no dar clases, afectando el interés social de mejorar la calidad de la educación pública en el país.
El funcionario explicó que, tanto en el Pacto para la Reforma Educativa como en lo referente al Acuerdo firmado en el 2021 con el Ministerio de Educación, la ADP se comprometió a respetar los horarios de docencia.
«El gremio incumple con este paro disfrazado lo acordado y para colmo pide nuevas demandas salariales que exceden por mucho las posibilidades del presupuesto destinado a la cartera», expresó Hernández.
Agregó que los docentes son el sector profesional mejor pagado en la administración pública, tienen amplios beneficios y los logros del sistema educativo no reflejan lo que la sociedad invierte en los docentes.
Incumplen acuerdos
Para Acción Empresarial por la Educación (EDUCA) los paros de la ADP y las asambleas en horario escolar incumplen, por enésima vez, el único compromiso del Pacto Nacional para la Reforma Educativa que tiene carácter irrenunciable.
«Una vez más vale la pena recordar que la sociedad dominicana hace un enorme esfuerzo por financiar la educación pública de niños, niñas y adolescentes. Este año 2023 el presupuesto asignado al Minerd supera los RD$ 275,300 millones. Estos recursos no surgen de la nada», recordó el director Ejecutivo de Educa, Darwin Caraballo.
Actitud de confrontación
Por tradición la ADP ha mantenido una actitud de confrontación con las autoridades educativas, y a pesar de que su presidente aseguró en meses pasados que prevalecería el diálogo antes que la confrontación para resolver conflictos, han vuelto a las movilizaciones y paros afectando la docencia.