Un dominicano residente en El Bronx, Nueva York, fue condenado esta semana a entre 25 años y cadena perpetua por el asesinato de su novia en 2019, anunció el fiscal de distrito Darcel D. Clark.
Luis Severino, de 54 años, quien fue descrito como un inmigrante indocumentado que había reingresado a los EE.UU. después de ser deportado, fue condenado por un jurado el pasado 1 de agosto por asesinato en segundo grado y sentenciado por la jueza de la Corte Suprema de el Bronx, Audrey Stone, el lunes pasado.
Según los fiscales, Severino mató a su novia, Cindi Olivo, de 32 años, apuñalándola en el cuello en algún momento entre el 13 de junio y el 12 de julio de 2019. Luego huyó de la escena, dejando su cuerpo en su departamento durante semanas hasta que los vecinos reportaron un olor fétido a las autoridades el 12 de julio de 2019.
Ese mismo día, Olivo fue encontrada «severamente descompuesta» en el dormitorio del apartamento que supuestamente compartía con Severino.
«El acusado apuñaló a su novia en el apartamento compartido. Su cuerpo fue encontrado por los socorristas semanas después. El acusado, sin mostrar ningún remordimiento, ahora pasará muchos años en prisión», dijo el fiscal de distrito Clark tras dictarse la sentencia.
Severino fue arrestado el 15 de octubre de 2019.
Historial criminal
Las autoridades identificaron a Severino como un inmigrante ilegal que había reingresado a los EE.UU. después de ser deportado.
Severino es ciudadano de la República Dominicana y nunca ha sido ciudadano estadounidense, según muestran documentos de la corte federal al que accedieron medios neoyorquinos.
- También cuenta con un extenso historial criminal, que incluye posesión criminal de una sustancia controlada, venta criminal de una sustancia controlada, hurto mayor y posesión criminal de un arma.
El Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos (ICE, por sus siglas en inglés) dijo que Severino fue expulsado del país hacia la República Dominicana el 18 de octubre de 2016.
En una fecha y lugar desconocidos, Severino reingresó de manera ilegal a los EE.UU. sin inspección, admisión o libertad condicional por parte de un oficial de inmigración.