Las operaciones en el mercado de Chicago de referencia para las materias primas agropecuarias se volvieron frenéticas luego de que fuerzas rusas lanzaran un ataque contra Kiev, la capital de Ucrania. La soja, cuyo contrato vence en marzo próximo, sube casi USD 19 y la tonelada cotiza a USD 634,30, alcanzando su nivel más alto desde 2012, como consecuencia de las preocupaciones con relación a los suministros mundiales, y a las subas registradas en los mercados de aceites vegetales.
Por otro lado, se registran fuertes subas en los cereales. El maíz cuyo contrato vence en marzo próximo sube USD 13,50 y la tonelada cotiza a USD 283 a raíz de las tensiones en el conflicto ruso-ucraniano, y también a posibles mermas en la producción en Sudamérica, por la ausencia de precipitaciones. Por el lado del trigo, el contrato marzo sube USD 18,40 y cotiza a USD 340,20 la tonelada, el nivel más alto de los últimos 9 años, donde los enfrentamientos militares entre Rusia y Ucrania, exacerbaron los riesgos de suministro del cereal en el mercado global, ante una posible interrupción del comercio en esa región.
En las últimas semanas los precios de la soja y también del maíz experimentaron grandes subas por una restricción en la oferta más que por un incremento en la demanda. Esta restricción provino, principalmente, de Brasil y Argentina, donde la producción de ambos cultivos se ubica en niveles por debajo de lo esperado, como consecuencia de una fuerte sequía, que en el caso de nuestro país la misma continúa y muchas zonas productivas, por otro lado, deben enfrentar los incendios, como sucede en las provincias del litoral.
El conflicto que involucra a dos de los principales productores de trigo del mundo, Rusia y Ucrania, además de jugadores igual de importantes en el mercado de maíz causó una reacción explosiva en los mercados de granos. La soja, ya presionada por factores climáticos en Sudamérica, apenas se plegó al movimiento.
El contrato de soja a marzo saltó más de USD 32 para llevar a la cotización a los USD 647 la tonelada, un máximo en más de un año. Los movimientos de los precios del trigo fueron aún más extremos, con el contrato a marzo arriba USD 18,37 en el día para llevar al precio a los USD 340 por tonelada.
Sólo en febrero el trigo gana 21% en el mercado de Chicago, mientras que la soja avanza 17%, debido a la evolución de la situación en Ucrania. Ayer el precio de la oleaginosa alcanzó el mayor valor de los últimos 9 años. Y al respecto, los especialistas de la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) señalaron que “el fuerte trastocamiento de los mercados de aceites vegetales por el conflicto ruso-ucraniano lleva a subas en el aceite de soja y de palma. Esto se da por potenciales limitaciones en los embarques de aceite de girasol desde la región del Mar Negro, desde donde se exporta casi el 80% del aceite de girasol comercializado en el mundo”.
Mercados
La reacción de las materias primas agrícolas no es la única. El inicio de las acciones bélicas sacudió a los precios de todos los commodities. El precio del petróleo ha subido a más de 100 dólares el barril por primera vez en siete años. También los mercados se sacudieron. La moneda rusa, el rublo, se desplomó hasta un mínimo histórico frente al dólar y el euro mientras que los mercados europeos se desplomaron.
Por último, en materia de campaña de soja en la Argentina, el último relevamiento de la BCR planteó que se espera una producción de 40,5 millones de toneladas, lo cual significaría un nivel inferior a la campaña previa en 4,5 millones de toneladas. Si bien algunas regiones recibieron precipitaciones luego de la ola de calor experimentada en la primera quincena de enero, no fueron extendidas, agravándose la situación del cultivo. De esta forma, el 35% de la superficie sembrada con soja se encuentra en condiciones regulares a malas, y se perderían unas 750.000 hectáreas.