Horrorizado, al igual que la sociedad, reaccionó Luis Abinader a la tortura y mutilación que sufrió hasta morir un niño de ocho años a manos de su tía en el distrito municipal de Verón, provincia La Altagracia.
Durante LA Semanal con La Prensa, el mandatario explicó que la muerte del niño fue un tema tratado durante la reunión de seguimiento al Plan de Seguridad Ciudadana en la Policía Nacional y no pudo terminar de escuchar la descripción del hecho.
«Ninguno estábamos preparados para escuchar esa barbaridad», expresó.
«Ninguno estábamos preparados para escuchar esa barbaridad», expresó.
El mandatario consideró que las penas por crímenes tan horrendos deben ser endurecidas y, para eso consideró que es necesaria la aprobación de un nuevo Código Penal.
«Personalmente pienso que ella (Carmen Jiménez) no va a pagar eso con 200 años de cárcel y de alguna manera hay que endurecer para penalizar en su mayor medida», espetó.
Aunque reconoció que se deben contemplar penas más severas, sostuvo que se debe analizar hasta qué punto un hecho atroz como el ocurrido el sábado pasado puede ser controlable, ya que fue cometido por un familiar.
«Hay que endurecer esas penas, pero hay que ver también la sociedad, porque no estamos hablando de una desconocida, eso uno no sabe hasta dónde puede ser controlable».
Caso del menor
De acuerdo a los reportes de las autoridades, la tía del menor, Carmen Jiménez y un hombre identificado como González Valentín Rojas torturaron y mutilaron al niño de ocho años, quien falleció en el Hospital Municipal de Verón tras sufrir 147 heridas, shock hemorrágico, shock hipovolémico, shock séptico, con seis pérdidas dentales, producto del maltrato confesado por su propia tía.
En el interrogatorio, supuestamente, Jiménez admitió que había torturado al niño durante varios días, alegando que éste era muy molestoso y rompía cosas en la casa. La mujer dijo que utilizó un cuchillo, un machete, un cable para amarrarlo y otras herramientas para propinarle los golpes.
De su lado, el padre del menor, Santiago Colomé Jiménez, declaró que había confiado su hijo a su hermana Carmen, a quien le depositaba una suma de RD$6,000.00 cada 15 días para su manutención. Colomé Jiménez manifestó que no había visto a su hijo desde principios de noviembre.
Los sindicados como responsables de este horrible crimen fueron detenidos y están a la espera de que se le conozca medida de coerción.