SANTIAGO DE LOS CABALLEROS.– Ha repercutido aquí el caso en que una casa resultó destruida por un cohete lanzado al espacio por estudiantes del Instituto Iberia como parte de un ensayo científico que pretendían presentar ante la Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio(NASA).
Al parecer, la prueba se salió de control y, a su regreso a tierra, el cohete se precipitó accidentalmente en la residencia, localizada en el residencial Isabel G, y provocó un incendio.
Nelson Mauricio Collado, dueño de la residencia afectada, demandó al Colegio por daños a su propiedad.
Su abogado, Francisco Javier Ascona Reyes, depositó ante el Departamento de Denuncias y Querellas de la Fiscalía de Santiago la instancia legal en contra de los ejecutivos del colegio Iberia, que se niegan a pagar por los daños.
Ascona Reyes indicó al Listín Diario que el Colegio no contaba con los permisos ni la supervisión de ningún organismo del Estado, llamados a controlar este tipo de maniobras.
“Si la familia de Nelson Mauricio Collado hubiera estado con su esposa y sus hijos la historia hubiese otra; estuvieran contados los muertos”, dijo.