Una vez más, el canciller de República Dominicana, Roberto Álvarez, ha clamado ante el Consejo de Seguridad de la Naciones Unidas sobre la situación de Haití de que se necesita una fuerza multinacional para enfrentar las bandas criminales a fin de devolver la paz a esa nación.
En un mensaje de varios minutos, Álvarez citó que las pandillas, apoyadas por parte de los sectores político y militar de Haití, no solo atentan contra la tranquilidad, sino que obstaculizan el combate al hambre y al cólera, enfermedad que ha matado a más de dos mil personas desde que desató este brote.
“¿Cómo podrán repartirse los alimentos para alrededor de cinco millones de personas en riesgo de sufrir inseguridad alimentaria aguda en el 2023, incluidos unos dos millones de niños, niñas y adolescentes, de los cuales aproximadamente 250,000 padecen desnutrición aguda?”, se preguntó el canciller frente a los colegas de la ONU.
En ese sentido, en nombre del Gobierno dominicano, el canciller pidió cuanto antes la intervención internacional para normalizar las bandas en el vecino país.
Enumeró los esfuerzos que ha realizado la República Dominicana en favor del pueblo haitiano: canalización del suministro de combustible para los hospitales, y otras entidades; apoyo en seguridad al transporte del personal diplomático y atención de salud gratuita, citando que el 32.4 % de los partos en los hospitales son de haitianas.
Sin embargo, reiteró que la República Dominicana no puede cargar sola la crisis de Haití, sino que debe salir del liderazgo haitiano, pero con la ayuda internacional.
Dijo que el gobierno y la policía haitiana hacen el esfuerzo por recuperar la paz, pero se necesita la ayuda internacional.
El funcionario dominicano se adhirió a la opinión de Antonio Guterres, secretario general de las Naciones Unidas, quien citó: “Mientras se consolida la ayuda a la capacitación de su policía, es necesaria una fuerza robusta, capaz de recuperar la paz y poner fin a la violencia desatada por las bandas armadas, infiltradas por el poder político y económico”.
Álvarez espera que para enero del 2023 se inicien las sanciones contra las bandas “a fin de tener mayor alcance en la persecución de los criminales”, porque a su juicio, ya “se cruzó ya el umbral de las buenas intenciones”.