Consternación e impotencia en los residentes de Los Alcarrizos al no poder evitar cuádruple crimen

La consternación e impotencia invaden este domingo a los residentes en la localidad Los Coquitos, en el municipio Los Alcarrizos, que no pudieron evitar que Esteban Javier Cora le quitara la vida a su expareja, a la madre y hermana de esta y a otro hombre. Tambien hirió a un niño.

Testigos del crimen contaron a periodistas de Listín Diario que el individuo de 31 años, identificado por las autoridades como el autor de las muertes, discutió con su expareja, con quien procreó dos hijos y de quién se había separado hace un año.

Durante la discusión, Indira de la Cruz, de 19 años, trató de buscar ayuda al ver las intenciones violentas del verdugo, quien es policia, dscrito a la Digesett, y se escudó detrás de un hombre, quien tambien resultó muerto.

El señor Lirán Méndez, de 54 años, quién no guardaba relación familiar ni de amistad con ellos, fue la primera víctima del matador.

El horrendo relato continúa cuando Indira sale corriendo de la escena hacia su casa, en el barrio La Unión, en Los Coquitos, para protegerse de su expareja, pero este la persigue hasta la vivienda.

“Ahí la mató a ella, a su mamá y a su hermana”, dijo un testigo a este diario.

En el acto, el presunto homicida hirió de bala a su propio hijo, un menor de cinco años quien, según familiares, ya se encuentra fuera de peligro.

Luego de cometer la masacre, el imputado abandonó el lugar y se trasladó a su residencia. “Pidió una cerveza, trató de disimular, pero luego confesó e intentó darse un tiro”.

Al percatarse de sus intenciones, sus vecinos intentaron detenerlo quitándole el arma de fuego que portaba, desviando la bala que lo hirió en un pie.

La otras dos víctimas fueron identificadas como Marianeli Rosario Tejeda, de 36 años e India Paola Rosario de la Cruz, de 16.

El coronel Diego Pesqueira, vocero de la Policía Nacional, confirmó a este medio que Esteban Javier Cora se encuentra bajo custodia del cuerpo del orden.

Minutos antes de su detención, Cora pidió perdón a sus hijos y le pidió a su madre cuidar de ellos, y justificó su acción diciendo que se encontraba en depresión.

“Yo estaba en depresión, estaba tratando de buscar ayuda, solo quería estar con mi familia”, dijo.