Palin insiste en que la publicación actuó con mala fe para tratar de perjudicarla y busca una compensación económica. (Fuente externa
NUEV AYORK.- Un esperado juicio por difamación que enfrenta a Sarah Palin, exgobernadora de Alaska y al diario The New York Times arrancó este jueves en Nueva York, después de que fue pospuesto por el contagio con covid-19 de la que fuera aspirante republicana a la vicepresidencia de Estados Unidos.
Palin, una notoria crítica de las vacunas anticovid, dio positivo el pasado 24 de enero, cuando estaba previsto el inicio del proceso, muy esperado por las posibles implicaciones que puede tener para las amplias protecciones legales de las que la prensa disfruta en el país.
La demanda de Palin data de 2017, cuando el diario publicó un editorial en el que aludió a un tiroteo sucedido en 2011 en el que murieron seis personas y resultó gravemente herida la entonces congresista demócrata Gabby Giffords.
En el editorial, el periódico vinculaba el suceso con un mapa distribuido por la campaña de acción política de la republicana y que señalaba varios distritos electorales, incluido el de Giffords, con un punto de mira.
El diario reconoció su error y publicó una corrección dos días después, pero Palin insiste en que la publicación actuó con mala fe para tratar de perjudicarla y busca una compensación económica. Un juez desestimó inicialmente el caso, pero su decisión fue revisada luego por un tribunal federal de apelaciones, lo que ha desembocado en el juicio que arrancó hoy.
En sus argumentos iniciales la representación de Palin defendió la necesidad de que los medios rindan cuentas y acusó al Times haber promovido una “narrativa” en contra de la republicana, ignorando los hechos reales, según recogen medios locales.
Los abogados del periódico, mientras dijeron que el editor encargado de la pieza no tenía ninguna intención de establecer un vínculo directo entre el mapa de la campaña de Palin y el tiroteo y que no se dio cuenta de cómo algunos lectores podían interpretar la referencia.
En todo caso, insistieron, el diario actuó rápidamente para corregir el error y según dijeron, no hay pruebas creíbles de que la publicación supusiera daños para Palin.
El caso es visto por numerosos analistas como un emblema de un posible giro en la Justicia estadounidense en este tipo de procesos, después de que jueces conservadores del Tribunal Supremo hayan defendido la necesidad de revisar la jurisprudencia en este ámbito, que ofrece fuertes protección a la prensa y que, en general, requiere que una figura pública demuestre que el medio actuó con mala fe en su contra.
Esas posturas revisionistas ganaron fuerza durante la Presidencia del republicano Donald Trump (2017-2021), que en numerosas ocasiones llamó a cambiar las normas sobre difamación para facilitar las demandas contra los medios.
El juicio ganó aún más notoriedad después del positivo por covid-19 de Palin y de que la política fuese vista cenando en un restaurante neoyorquino a pesar de no estar vacunada y de que las normas municipales requieren mostrar prueba de inmunización para hacerlo.